Ayer, 22 de febrero de 2017, miércoles, volvimos a leer un artículo en el diario La Razón, en el ABC y supongo que en otros medios, que merecen sobradamente el calificativo de "perla mediática" sobre o, mejor dicho, contra la Educación, en España. .
El título no puede ser más llamativo y, a la vez, engañoso. "PROFESORES La mayor oferta de la historia:150.000 plazas", dice el de La Razón.
Una vez leído no queda claro si hay algún dato que sea cierto o que tenga el más mínimo valor. En primer lugar es cuestionable la oportunidad de la noticia. En unos momentos de gran incertidumbre para decenas de miles de profesoras y profesores ya que son muy pocas las comunidades autónomas que han manifestado su intención de convocar oposiciones no parece serio lanzar esta extraña idea de los supuestos miles de plazas que se convocarán. Parece ser que el ministro del PP, señor Montoro, ha llegado a amenazar a aquellas comunidades que convoquen los procesos selectivos habida cuenta de la situación de bloqueo -al menos temporal- de los presupuestos generales del Estado. En esa situación de desconcierto en la que se cuentan por miles las opositoras y los opositores o han dejado ya de prepararse o se lo están planteando debe considerarse como una mala broma el dato del titular.
¿150.000 plazas? ¿dónde? y, sobre todo ¿cuándo?
Ese recurso ¿estilístico? de dar un dato global para luego, de alguna manera, desmentirlo, es muy socorrido pero tiene muy poco de verdadero periodismo.
Por otra parte soltar topicazos cargados de malas intenciones tampoco es muy profesional. Así, hablar de la mejora de la enseñanza de los idiomas, de las nuevas tecnologías, de la mejor preparación del profesorado, de Finlandia y demás, sencillamente, una demostración del vacío imperante y de las verdaderas razones del artículo: crear cortinas de humo y faltar a la verdad. Se deslizan verdaderas falacias aunque en realidad se podría hablar de falsedades, de mentiras y hasta de maledicencia. Desde luego nombrar al actual secretario de Estado Marcial Marín ya es suficientemente esclarecedor: más que humo se trata de gases tóxicos.
Como ya viene siendo habitual se lanzan esas ideas de que hay que hacer unas pruebas de acceso muy difíciles y rigurosas, dando la sensación de que las actuales no lo son. Se habla de la preparación del profesorado como si fuese negativa, se habla de la formación permanente cuando verdaderamente fue el PP el que se la cargó...se dice que el profesorado gana mucho más que sus homólogos europeos, siendo falso, se dan cifras que nada tienen que ver con la realidad y hasta se habla de una etapa educativa cuyo nombre cambió hace ya muchos años.
Lo que de verdad tiene que cambiar radicalmente en este país es el trato que se dispensa mediáticamente a diferentes temas en general pero, en particular, a la escuela pública.
En fin, lamentable artículo sobre un tema tan delicado del que dependen tantos profesionales..
¿150.000 plazas? ¿dónde? y, sobre todo ¿cuándo?
Ese recurso ¿estilístico? de dar un dato global para luego, de alguna manera, desmentirlo, es muy socorrido pero tiene muy poco de verdadero periodismo.
Por otra parte soltar topicazos cargados de malas intenciones tampoco es muy profesional. Así, hablar de la mejora de la enseñanza de los idiomas, de las nuevas tecnologías, de la mejor preparación del profesorado, de Finlandia y demás, sencillamente, una demostración del vacío imperante y de las verdaderas razones del artículo: crear cortinas de humo y faltar a la verdad. Se deslizan verdaderas falacias aunque en realidad se podría hablar de falsedades, de mentiras y hasta de maledicencia. Desde luego nombrar al actual secretario de Estado Marcial Marín ya es suficientemente esclarecedor: más que humo se trata de gases tóxicos.
Como ya viene siendo habitual se lanzan esas ideas de que hay que hacer unas pruebas de acceso muy difíciles y rigurosas, dando la sensación de que las actuales no lo son. Se habla de la preparación del profesorado como si fuese negativa, se habla de la formación permanente cuando verdaderamente fue el PP el que se la cargó...se dice que el profesorado gana mucho más que sus homólogos europeos, siendo falso, se dan cifras que nada tienen que ver con la realidad y hasta se habla de una etapa educativa cuyo nombre cambió hace ya muchos años.
Lo que de verdad tiene que cambiar radicalmente en este país es el trato que se dispensa mediáticamente a diferentes temas en general pero, en particular, a la escuela pública.
En fin, lamentable artículo sobre un tema tan delicado del que dependen tantos profesionales..